La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

04 julio 2013

Se oculta el cielo
tras un velo de polvo.
El desierto amenaza
cubrir la ciudad.

Troncos oscuros, 
ramas desnudas.
El reflejo del frío.

Entre musgo y silencio 
sombras quietas
atrapadas,
tratan de huir.

¿Habrán anidado palomas
plumas grises y blancas
entre ladrillos que no están
en el muro derruido?

Lo que supo ser
terciopelo y brillantes
hoy es un trapo viejo
y polvoriento.

Parpadeo tenue
el vuelo de un pájaro
atravesó su mirada.

Callados esperan
el momento de ser útiles
las chimeneas,
solitarias y vigilantes.

Luna nueva
uña frágil 
arañando el cielo.


Lluvia

Arde el horizonte, 
bosque y tormenta
salvajismo de luz en el ocaso
confundido en el viento
el piar de bandadas.
Parece detenerse un instante el río
luego huye cascada abajo.
Es inminente la lluvia
se percibe en el  aire:
ha acertado el croar de las ranas
callan las chicharras su canto.
Una oración de gracias
se eleva silenciosa.