La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

24 noviembre 2016

explicar con palabras de este mundo
las heridas que se hacen en otro
Gabriel Jiménez


una llave tiene
una serie de dibujos arbitrarios
para encajar en determinada cerradura
logrando el milagro de dominarla
las palabras se dicen
para ser entendidas por quienes
poseen las muescas adecuadas
para lograr sentido
pasamos por la vida
en perpetuo ensayo y error
hasta encontrar el dibujo,
el grosor, la fuerza,
tenacidad o golpe de suerte
que nos comunica

sueño a veces un universo poblado
de palabras ganzúa
que encajen perfectas,
sin importar cerradura
permitan decirlo todo
con total  claridad