La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

11 octubre 2009

Brocato dorado barato
encontrado en el once
a las once de un día oferta excelente
paga cien lleva uno
lo luce de día lo luce de noche lo usa con
tacos tan altos para pies tan viejos
estiradas patas de gallo viejo
gallo dorado de brocato francés
plumas perennes sonrisa radiante
dientes tan blancos tan tantos
encerrados por siempre entre labios
fragantes rimbombantes
jugando visitas fingidas los lunes
reuniones de compras los martes
cosméticos por canje horribles tinturas
doradas los viernes
por siempre orquídeas los lunes
cardos los miércoles de cenizas que vuelan
se posan transpiran cenizas
invitados apretujados acosados
lo digo no lo digo
yo soy muy respetuosa
me educaron tan bien
soy tan educada
que puedo proponer que maten a los otros
sin perder la sonrisa sonreiría por siempre
si no tengo que ver los pobres los jueves
locas algunas caminando la plaza
porqué no se olvidan miran adelante
se hacen presentables van a la peluquería
deben estar despeinadas nunca usé ni usaré
un pañuelo que no sea Hermès edición exclusiva
que pague vidriera para que yo lo luzca
dorad bordado brocato.