La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

02 julio 2008

Otra historia destruída
La cacería finaliza
Una esfera roja sube por el cuerpo
Cereza, mundo prisionero
Rojo, demasiado rojo
Quizá llegue hasta los ojos
Su color conforta
Un tenue susurro adormece
Reposo o angustia
Pero la trampa, está montada.

( a partir de un cuadro de Max Ernst)