La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

21 julio 2006

Tal vez sea la guerra que me ha paralizado.
Está lejos, se sabe poco, se ocultan datos.
Sólo se puede imaginar lo que está sucediendo, los medios oficiales hablan poco o tergiversan los hechos.
No se habla de guerra sino de conflicto, no se bombardea a civiles sino a supuestos terroristas, no se dice invasión sino intervención, no se mencionan las numerosas ojivas nucleares que Israel posee y que no dudará en utilizar, porque no se trata de Corea sino de un poderoso de los mandan en el mundo.
¿Irán los cascos azules, los cascos blancos, la cruz roja, la medialuna roja, los veedores de la ONU, alguien irá a tratar de poner un freno a la masacre?
¿Quién le devolverá al mundo los tesoros que están desapareciendo en los bombardeos al Líbano?
¿Hasta dónde llegarán los invasores?
¿Será posible algún modo de paz?

2 Comments:

Blogger Solentiname said...

parece que van a llegar hasta el colmo, mientras los demás miran, impávidos.

9:44 a. m.  
Blogger Matías said...

hay que luchar en contra del capitalismo yankie, ese que solo deja a su paso una estela de horror y pobresa, ese que succiona la sangre de lo que quede con vida para crecer, ese que nos esta atando de a poco... hay que morir de pie si es necesario, pero morir antes de agachar la cabeza, me cansaron estos hijos de puta...

9:09 p. m.  

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