La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

30 noviembre 2010

Un arma fue encontrada
entre las ropas del muerto.
Un arma, dicen, tenía,
justo al alcance de la mano.
Un arma sacó, dicen,
brillaba en su mano.
Un arma disparó, afirma,
escueto, el informe policial.
Fue en acto de servicio, declara,
el agente en su descargo.
Inexorable historia repetida
tragedia, farsa, mentira,
como la infancia breve
robada por la calle.
Siempre aparece un arma
olvidada al lado del cadáver.