La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

31 mayo 2006

Empieza el miércoles, otro día de miércoles
Frío, puto frío que ya me hartó. Días cortos, poco sol,una porquería
Caminar, pelear, aguantar
Poner cara de póker para que no te jodan, cara de culo para que no te molesten, cara de boludo para que te rasquen, cara de " te entiendo, yo pasé por lo mismo" para tus amigos depresivos, sonrisas para los amigos no depresivos (son los menos, tengo imán para la depresión ajena), puteadas para los que creen ser jefes.
Pasar por ahí como dice el tango:
"si mi vida es un tormento
jamás lo vas a saber"

3 Comments:

Blogger Matías said...

just one word, wonderfull

6:45 p. m.  
Blogger blanconegro said...

gracias por leer mis rayes

11:43 p. m.  
Blogger Matías said...

de nada, gracias a vos por dejarme disfrutar leyendo tus escritos...

5:39 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home