La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

14 junio 2011

Un fulgor pálido delata la medusa que flota en un mar oscuro, denso como de tinta o como de sangre; pero es la noche que llegó demasiado pronto, la noche que viene a apagar todas las luces que brillaban entre las olas y ahora huyen hacia lo más profundo, ocultas entre los brazos interminables de las algas.
Luces pálidas, robadas por pequeños seres multiformes para iluminar sus abismos, donde la noche no llega.