La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

11 octubre 2007

Los mismos que hoy se rasgan las vestiduras por el precio del tomate y el de la calabaza, son los que se quedaron callados cuando se entregaron nuestros recursos naturales, se privatizaron los servicios públicos, se destruyó la educación, se mercantilizó la salud, se amordazó la justicia.
Creo que se quejan porque ahora no pueden viajar a Miami a comprar porquerías.

1 Comments:

Blogger Matías said...

y seran los mismos que insulten en un futuro a los culpables de vender el sur...

4:06 p. m.  

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