La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

12 junio 2015

Entre vapor de ollas y silbido de agua hirviendo, casi sin moverse, Lee reina en su cocina.
Pocas palabras, en un idioma que no logra sentir familiar.
Comidas listas, casi siempre las mismas, casi siempre las que se espera que cocine un cocinero oriental cargado de años.
Qué piensa el cocinero mientras trabaja, qué hace cuando llega la noche, qué hace cuando está a solas.
Lee guarda secretos.
Lee se esconde tras el cocinero oriental.
Trata de desentrañar secretos, tiene una vida oculta tras de las ollas: entender si es orden o es deseo lo que el creador entregó a los hombres, contenido el secreto en una sola palabra: timshell.