La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

04 diciembre 2014

La historia se repite
la lucha es perpetua:
siempre habrá
quijadas de burro
amenazando a quien nace
bajo el signo de Abel.
Sufriente, se esconde
para salvar del castigo
al que jamás 
quiso ofender.