La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

27 noviembre 2013

todo cabe en el fuego
lo sucio lo viejo lo roto
se hacen luz por igual
indistinguibles resplandores
de lo que fue
alguna vez lo más deseado

todo cabe y seguimos
arrancando telarañas
desprendiendo maderas
arrojando cartones
papeles brillos deslucidos
humo sofocante
si el viento no ayuda
transparencia oscura
cuando huye

todo cabe en el fuego
ojos como alaridos
vos y yo seguimos
alimentando las llamas
con los restos
de lo que alguna vez
fue refugio.