La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

01 julio 2011

1-
Desde el espejo,
una imagen que no reconozco.
Es la luz,
me miento.
O quizá el frío.
Pero ellos no pueden
aniquilar un alma.
2-
Frío,
más allá del anhelo.
Frío que no hiela,
que incendia,
abrasa,
hasta dejar,
solamente,
un pálido montón de cenizas.