Pequeñas dendritas rosadas cruzando un mar de gris opaco, allá lejos el sol rojo resignado a ser sólo una mala copia de la luna, pálido y febril sin encandilar(engañar) a nadie.
Tarde triste como pocas, el sol también se entregó ya no quedan esperanzas para los que apenas aspiramos a ser una pequeña llamita dentro de una habitación pequeña.
Gris opaco lejano azul surcado por leves plumas incandescentes muriendo parece estar el día, el sueño y tantas cosas...
Tarde triste como pocas, el sol también se entregó ya no quedan esperanzas para los que apenas aspiramos a ser una pequeña llamita dentro de una habitación pequeña.
Gris opaco lejano azul surcado por leves plumas incandescentes muriendo parece estar el día, el sueño y tantas cosas...
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