La resonancia de los suplicios

El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación. En los "excesos" de los suplicios, se manifiesta toda una economía del poder. Michel Foucault, Vigilar y castigar, Siglo XXI editores, Buenos Aires (2002)

Nombre: blanconegro
Ubicación: Argentina

19 abril 2016

adivinás el fin
armás con palabras el modo
en que decirlo sea elegante
pero no siempre te sale
y quedás pagando
por avivado
por querer mentir
te mentís la vida
que querés tener
con todo el artificio
con lo más caro
y lo más estúpido
como a veces sos
pero despertás
la vida pega fuerte
y vos sos débil para seguir
confirmás que se puede vivir con menos.
Aprendés los códigos de la luz solar,
sabés que la tarde alarga la noche
y te dormís temprano
te despierta el sueño
a veces pasa
te reconocés en otro
el que casi siempre pierde
el pecador
no tenés opción
para elegir
el tren se va
te queda el consuelo
muchas veces la mina
besa al perdedor

(En cursiva texto de Valeria de Vito)